[El Cartucho Dominguero] El trono usurpado, un poco de amena lectura para saber más de Dragon Age: Origins



Sí, lo se, hoy es sábado y tocaba un Cartucho Visual... Pero, no se, se me hacía un sábado muy raruno: el sol, la gente en la playa, las terrazas a todo tren... No me preguntéis por qué pero me parece que es un sábado muy... dominguero.

Así que he decidido lanzarme, adelantarme un día y postear un Cartucho Dominguero. ¿Y qué mejor forma de pasar un sábado adomingado que leyendo un libro? Hoy os traigo mis opiniones sobre El trono usurpado la precuela en forma de libro de Dragon Age: Origins. Seguid leyendo si queréis saber más.

Seguro que mucha gente (gente que no sabe lo que dice, ya me entendéis) pensará por ahí que literatura y videojuegos son dos disciplinas bastante alejadas. Es cierto que hay juegos que, claramente, no destacan por sus grandes dosis literarias. Por poner un ejemplo se me ocurre pensar en nuestro fontanero favorito en muchas de sus entregas... ¿os suena la historia Dinosaurio secuestra dulce princesita?

El de New Super Mario Bros. Wii estaba especialmente currado con la aparición totalmente por sorpresa de los pequeños Koopas de... redoble de tambores... ¡dentro de una tarta! ... en fin

Pero también es verdad que hay otros videojuegos en los que la trama, los personajes, sus relaciones, los giros del guión, etc. son la base jugable sobre la que se desarrolla el producto. Unos expertos en escribir grandes guiones y aplicarlos (¡y de qué manera!) a sus videojuegos son los chicos de Bioware. Muchos de sus juegos te invitan inexorablemente a seguir jugándolos con tal de desvelar la historia que se desarrolla ante tus ojos y tu mando.

Algunas de esas historias bien podían haber sido una novela, así que ¿por qué no editar una novela sobre sus juegos? Precisamente éste es el caso que nos ocupa. Se trata de El trono usurpado, una novela que se sitúa como una precuela al videojuego Dragon Age: Origins.


Su autor es David Gaider, cuyo nombre quizá no os suene por ser un famoso novelista. Eso sí, cuando os cuente su currículum ya veréis que tampoco es un cualquiera. Lleva trabajando para Bioware desde 1999 y ha participado escribiendo los guiones y personajes de Baldur’s Gate 2 y su extensión El Trono de Bhaal, Star Wars: Kings of the Old Republic y Neverwinter Nights. Además fue el Lead Writer (guionista de los importantes, vaya) de Dragon Age: Origins.

Es el responsable de escribir los personajes de Zevran, Alistair (aunque por este no tenga demasiado mérito xD), el rey Cailan (tampoco, muere rápido), Morrigan (ésta sí), Shale (el gólem de piedra de una de las extensiones) y casi toda la historia de Duncan. Así mismo, fue el encargado de escribir las historias de los elfos dalishanos, el origen del humano noble, la Naturaleza de la Bestia (la historia de los hombres lobo en el bosque de Brecilia) o las misiones que ocurren en Risco Rojo. Además, también ha publicado The Calling, otra novela sobre Dragon Age. Casi nada, ¿eh?

Los dos son de su cosecha, más o menos igual de carismáticos, ¿no?

Pues centrándonos en El trono usurpado, éste narra la historia del rey Maric, el padre del rey Cailan (actual regente cuando se desarrolla Dragon Age: Origins) y su ascensión al trono. Para ello contará con la ayuda del joven Loghain, sí sí, el malo malísimo del juego en cuestión. En el contexto histórico que se nos narra, los orlesianos habían invadido Ferelden, expulsado a su rey y colocado un regente en su lugar. Éste, un tío más malo todavía que Loghain, se dedicó a perseguir a la estirpe de los antiguos reyes con tal de aniquilarla para que no pudieran reclamar el trono algún día. A parte de, en sus ratos libres, someter y fustigar al pueblo ganándose una reputación nada buena.

El libro comienza precisamente con la huida del joven príncipe Maric después de que la comitiva de él y su madre fuera atacada por los orlesianos y ella se viera asesinada. A partir de aquí, y después de ser salvado por Loghain (un ladronzuelo en sus inicios), comienza su odisea con tal de recuperar el ejército rebelde (los leales al antiguo rey y contrarios a los orlesianos), hacerlo fuerte y poder recuperar el trono: un triángulo amoroso (o más bien cuarteto) por allá, un par de traiciones por aquí, batallas (victorias y derrotas), algo de magia y al final, el trono es recuperado y el rey invasor expulsado.

Este es Cailan, el actual rey en Dragon Age: Origins (aunque no dure 
más de un telediario) e hijo del prota del libro, el rey Maric.

Desde un punto de vista totalmente literario no podemos esperar grandes alardes de este libro. La historia funciona bien (aunque es un tanto predecible, más o menos lo que ocurría en Dragon Age: Origins) y los personajes tienen carisma, pero se nota que David Gaider no está acostumbrado a la novela y sí a los videojuegos. Situaciones un tanto forzadas y conversaciones demasiado épicas le ponen la nota negativa si somos un poco críticos.

Pero a parte de esto, El trono usurpado es una buena elección si quieres conocer un poco más de la historia de Dragon Age: Origins (en el juego se hacen bastantes referencias al padre del rey Cailan, su relación con Loghain y la expulsión de los orlesianos) o quieres pasar un rato entretenido leyendo un libro bien ligerito. A mí, críticas a parte, me gustó bastante.

Y ¿por qué no? es una buena forma de atraer jugones al vicio de la lectura, que nunca está de más.

1 comentarios - Add Yours

ToniCae dijo...

Tú siempre haciendo sangre que ya sabes que no puedo jugar al primero ;)
El de Saren me pilla un poco lejos, pero el del Hombre Ilusorio sí que me interesaría. Ya negociaremos

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